En un comunicado de prensa, el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls, anunció esta mañana a las 10:30 a.m. –hora de Roma-, que la condición de salud del Papa continua muy grave, pero no está en coma.
“Nada ha cambiado desde anoche”, afirmó Navarro-Valls.
“A las 7:30 de la mañana hubo un momento crítico” indicó el portavoz, pero no entró en detalles.