El director de la Sala de Prensa del Vaticano, Padre Federico Lombardi, pidió a los delegados mundiales reunidos en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima que se realiza en Copenhague, Dinamarca, recordar que todos tienen que asumir su responsabilidad en el cambio climático y atender especialmente a su impacto en los más pobres.
El editorial que esta semana ofrece para el informativo ‘Octava Dies’, del Centro Televisivo Vaticano, se titula "Copenhague y nosotros".
"Hace tiempo las preocupaciones ambientales y climáticas parecían a muchos un lujo. Preocupaciones de los ricos. Otros eran los problemas de los pobres, que debían sobrevivir y satisfacer sus necesidades primarias. Luego hemos comprendido que las cosas eran diferentes. Cuando existe la sequía o cuando se dan catástrofes ambientales, los pobres son los primeros en sufrir y en morir. Quien se encuentra en lugares más seguros o posee más recursos para nutrirse o protegerse puede superar mejor el empeoramiento de las condiciones ambientales", indica.