Durante las congregaciones generales del Sínodo de la Eucaristía, diversos obispos plantearon propuestas adicionales para ayudar a la “reforma de la reforma” litúrgica, encaminada a recuperar la reverencia en la Celebración Eucarística.

Mons. Javier Echevarria, Prelado del Opus Dei, hizo un llamado para “hacer lo posible para eliminar los abusos que perjudican al carácter sagrado de las Celebraciones Eucarísticas, y también habría que replantearse algunas normas cuya aplicación se presta a una interpretación abusiva”.

El Prelado señaló “a modo de ejemplo” que “podríamos plantearnos si son oportunas las ceremonias eucarísticas con un excesivo número de concelebrantes, que impide un desarrollo digno del acto litúrgico, o también habría que analizar la conveniencia de distribuir la Comunión a todos los participantes en una Misa con un gran número de fieles, cuando la distribución general va en detrimento de la dignidad del culto”.

“Conceder importancia al mantenimiento del sentido de lo sagrado en las liturgias eucarísticas supondrá un gran bien para toda la Iglesia”, concluyó.

Desde una perspectiva similar, Mons. Manfred Scheuer, Obispo de Innsbruck (Austria), destacó que “los descuidos y faltas con relación a la Eucaristía son consecuencia de la falta de orientación teológica y dogmática de los fieles”.

“Las parroquias donde raramente o nunca se celebra la Eucaristía –advirtió el Prelado– se disuelven y separan del ministerio sacramental”.

“¿Cómo vamos a justificar la obligación de anunciar la palabra y de celebrar los sacramentos que tenemos ante el Pueblo de Dios?”, preguntó Mons. Scheuer; y señaló que “esta pregunta no concierne sólo a la escasez de sacerdotes en muchos lugares, sino también a la falta de testimonio, el estilo de vida y el servicio sacerdotal”.

Adoración Eucarística

Por su parte, Mons. Jacques Perrier, Obispo de Tarbes y Lourdes (Francia), hizo un llamado a revitalizar la Adoración eucarística como una forma concreta de recuperar la reverencia a la Eucaristía.

“Observamos en nuestro país que la adoración eucarística es muy apreciada por las jóvenes generaciones de católicos. Para estas nuevas generaciones, no es un redescubrimiento. Es pura y simplemente un descubrimiento”, dijo el Prelado.

Mons. Arthur Roche, Obispo de Leeds (Inglaterra), advirtió por su parte que “facilitar el acceso a la Sagrada Comunión es tan importante como estar presentes en la celebración de la Misa. Tenemos que unir nuevamente el acceso a la Sagrada Comunión con la oferta de la Misa, a través de la cual participamos en el sacrificio de Cristo en la Cruz”.

“En este debate –agregó–, el valor del lugar de la Adoración Eucarística llega a ser muy importante para nuestra oración y nuestra contemplación”.