Obispos de México piden leyes y políticas que elimine el trabajo infantil

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), en ocasión de celebrarse hoy la Jornada del Día Mundial Contra el Trabajo Infantil que este año tiene como tema "No al trabajo infantil en el trabajo doméstico", exhortó a la sociedad civil a comprometerse en la promoción de leyes y políticas que garanticen los derechos de los niños frente a esta realidad.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el año 2010 se estimó que 15.5 millones de niños en el mundo entre los 5 y los 14 años (el 72 por ciento son niñas) participan de un trabajo doméstico ya sea remunerado o no. El 52 por ciento trabaja en condiciones peligrosas y están aislados, lejos de sus familias y un promedio de 5.5 millones son víctimas de trabajo forzoso y de trata de personas.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social de México reportó que 1`926,161 millón de niños no van a la escuela porque realizan trabajos domésticos en sus propios hogares y 124 mil menores de edad laboran como empleados domésticos. De estos, el 90 por ciento trabaja más de 35 horas a la semana.

Ante este problema, los obispos emitieron un comunicado en el que llaman al país a comprometerse, "según nuestras posibilidades, a eliminar el trabajo infantil en el trabajo doméstico, y a procurar las condiciones para que los derechos de los niños y niñas sean plenamente reconocidos, respetados, promovidos y defendidos, y puedan alcanzar un verdadero desarrollo integral".

En el mensaje recuerdan que la Convención sobre los Derechos del Niño defiende el derecho de los menores a vivir y gozar "de una familia" en un ambiente favorable con acceso a servicios salud, vivienda, alimentación y educación, entre otros.

Además, este documento señala la importancia de que los niños sean "informados de acuerdo a su edad y a expresar sus opiniones; a recibir atención especial en caso de alguna capacidad diferente; a ser protegidos de la pobreza y de cualquier clase de abuso; a jugar, divertirse y descansar".

Los prelados piden que se impulse el movimiento mundial contra el trabajo infantil y se fortalezca la capacidad que tienen las organizaciones frente a este tema, así como "la aplicación del numeral 189 del Convenio de la Organización Internacional del Trabajo que indica sobre el trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos y los Convenios relativos al trabajo Infantil", ?

"Jesús, que ha proclamado la grandeza, dignidad y derechos de la persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios, nos exhorta a evitar todo aquello que pueda dañar a los niños y niñas. Así nos recuerda el deber de actuar con justicia", subrayaron los obispos.