La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos hizo un llamado a los miembros del Congreso a poner de lado las diferencias que puedan existir entre sus miembros y unirse para ayudar en la reconstrucción de las regiones arrasadas por los huracanes Katrina y Rita, sin afectar a los más necesitados con el eventual recorte de programas de ayuda que ya existen.
“Las aguas de Katrina y Rita se han retirado y el Congreso debe hacer frente a las urgentes necesidades de reconstrucción y recuperación. Lo que hagamos será prueba y signo del tipo de nación que somos y que deseamos ser”, indica el mensaje firmado por el Arzobispo de Houston-Galveston, Mons. Josph A. Fiorenza; y el Obispo de Brooklyn, Mons. Nicholas DiMarzio.
También manifestaron su oposición “a cualquier esfuerzo que se haga para pagar los costos de Katrina y Rita recortando los programas esenciales que sirven para cubrir las necesidades básicas de personas de bajos ingresos o gente vulnerable”, que deben seguir recibiendo esa importante ayuda.