En un comunicado titulado "Solidaridad y esperanza tras la tragedia", la Conferencia Episcopal de Chile exhortó a sus compatriotas afectados por el terremoto del pasado sábado no caer en la desesperación sino tener serenidad y vivir la solidaridad para poder salir adelante y enfrentar adecuadamente la emergencia actual.
En el texto firmado por Mons. Alejandro Goic Karmelic, Presidente de la CECH, se señala que "el fallecimiento de hermanos y hermanas a consecuencia de esta catástrofe nos duele y nos conmueve. Oramos por su eterno descanso y nos unimos a sus familiares y amigos, pidiendo al Dios de la vida el consuelo y la esperanza".
Seguidamente expresan su cercanía y elevan su oración por "las personas que buscan angustiosamente a sus seres queridos y a tantas familias que han perdido todo, el fruto del esfuerzo de toda una vida. También en la Iglesia las pérdidas han sido cuantiosas: la gran mayoría de los templos e instalaciones en la zona más afectada han sido destruidos o dañados gravemente".