El Obispo de Tucson (Arizona) y Vicepresidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, Mons. Gerald F. Kicanas, se presentó ante el Congreso de este país para solicitar una urgente reforma migratoria ética que respete la dignidad de las personas.
En su intervención de ayer ante el Subcomité sobre Inmigración, Ciudadanía, Refugiados, Seguridad Fronteriza y Ley Internacional de la Cámara de Representantes, el Prelado, cuya diócesis se extiende a lo largo de toda la frontera entre Arizona y México, dijo que es testigo diariamente de "las consecuencias humanas de nuestro fracturado sistema inmigratorio", y añadió que "desde el punto de vista humanitario y ético, esta es una situación que debe resolverse de una manera humana e integral".
A pesar de que a menudo los análisis que destacan el impacto económico, social o legal ignoran o minimizan este aspecto, "la inmigración es ultimadamente un asunto humanitario, ya que impacta los derecho básicos y la dignidad de millones de personas y sus familias. Como tal tiene implicaciones morales", afirmó. "No podemos aceptar el trabajo y los impuestos de los inmigrantes sin proporcionarles al mismo tiempo protección bajo la ley".