El Administrador Apostólico de Santiago, Mons. Celestino Aós, aseguró que para sacar a Chile de la crisis sociopolítica que vive es necesario realizar cambios profundos en las estructuras y en las personas.
El estallido social que comenzó el 18 de octubre en Santiago se extendió rápidamente a todo Chile. La ciudadanía comprendió que la falta de políticas públicas que permitan una vida digna para todos era una necesidad transversal.
Sin embargo, junto a las manifestaciones hubo una escalada de violencia producida por grupos de personas que incendian y destruyen la vía pública, el comercio, entre otros desmanes.