Con la cooperación económica de feligreses y párrocos de diferentes poblaciones valencianas, el sacerdote Alexandre Alapont ha impulsado la construcción en la última década de doce capillas en la selva de Zimbabwe, donde desarrolla su labor misionera con los nativos de la tribu Nambya.
Todas las capillas han sido levantadas “gracias a las aportaciones económicas de feligreses y párrocos de diferentes poblaciones de la diócesis de Valencia”, declaró el misionero valenciano de 72 años.
Las capillas, construidas en piedra natural, bloques de cemento e, incluso, con paja en los techos, se reparten por la selva en zonas “donde nunca ha habido hasta ahora ni iglesias ni cristianos”, indica el P. Alapont.