Una encuesta reveló que una gran mayoría de los españoles se declaran creyentes –mayoritariamente católicos– pero admite que la fe no influye en el ejercicio de su sexualidad o sus opciones políticas.
El estudio, realizado por la fundación alemana Bertelsmann entre 21 mil personas de 21 países, sostiene que "cuatro de cada cinco españoles (79%) son religiosos, y el 27% de las personas se consideran incluso muy religiosas".
Según el sondeo, una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres españoles se declara "muy religioso". Sin embargo, el "64 por ciento de los españoles afirman que la religión tiene muy poco o nada de influencia" en su sexualidad y un 67 por ciento declara que la religión "no ejerce ninguna influencia" en sus opiniones políticas.