Numerosos católicos cubanos participaron este Viernes Santo en el Via Crucis, organizado en las calles del centro histórico de La Habana, así como en otras ciudades de la isla, donde se realizaron una veintena de procesiones.
Con autorización de las autoridades correspondientes, la procesión del Via Crucis partió del Convento de la Orden del Santísimo Salvador de Santa Brígida y culiminó en la Iglesia del Cristo del Buen Viaje.
El Arzobispo de La Habana, Cardenal Jaime Ortega y Alamino, recordó que "celebramos a aquel que vino a dar la batalla por el amor, por el bien y la justicia" y destacó que "todas las cruces de nuestra vida encuentran en la cruz de Jesús una respuesta".