Legalización de eutanasia infantil en Holanda causa rechazo en España

Después de que se diera a conocer la autorización por parte de la justicia holandesa de un protocolo que permitirá al Hospital Universitario de Groningen practicar la eutanasia infantil, diversas personas y organizaciones en España manifestaron su oposición a la iniciativa que viene remeciendo a la opinión pública mundial.

Al reciente rechazo de la decisión holandesa por parte de la Federación Internacional de Asociaciones de Médicos Católicos (FIAMC), calificándola de “violenta laceración de los fundamentos de nuestra convivencia en sociedad”, se sumó en España la de la Plataforma ciudadana pro-vida Hay Alternativas.

Su portavoz, Gador Joya, aseguró que su organización siempre defenderá el valor de la vida con independencia de las características de la persona. “Más aún cuando se trata de un niño sin capacidad de decisión al que se le quiere negar un futuro. Siempre queda la esperanza de encontrar un posible tratamiento y robamos su futuro sin saber que a lo mejor ese niño es capaz de aceptar su situación y vivir con dignidad”, declaró.

Contra los argumentos esgrimidos por el impulsor de la iniciativa, el pediatra Eduard Verhagen, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario de Groningen,  el presidente de la Asociación Española de Pediatría, doctor Alfonso Delgado manifestó que “contamos con tratamientos eficaces para combatir el dolor y medios para apoyar a los padres en su sufrimiento. Si se trata adecuadamente, no hay ninguna enfermedad que cause un sufrimiento insoportable, como se asegura en el protocolo”.

Sin embargo, el presidente de los pediatras juzgó “moralmente aceptable” administrar en determinados casos terapias con morfina para aliviar el dolor de los pequeños pacientes, aunque de ellas se derive finalmente la muerte. “Se trata de proporcionar la mejor calidad de vida posible a los niños enfermos, pero sin poner fin a su vida”.

Asimismo, Delgado expresó su temor de que el protocolo holandés dé pie para “eliminar” a niños con cualquier discapacidad.

Igualmente, el profesor emérito de Ética Médica de la Universidad de Navarra, Gonzalo Herranz, reclamó “frente a eutanasia, medicina paliativa”. En su opinión, la eutanasia infantil no pretende aliviar el sufrimiento del niño, sino el de los padres. “La eutanasia priva a los pequeños de la medicina paliativa y endurece el corazón de la sociedad, porque no creo que nunca ningún niño tenga ganas de morir”.

Defensores de la eutanasia no están convencidos

La decisión holandesa no ha convencido ni siquiera a algunos de sus más firmes defensores. Así, algunos miembros de la organización “Derecho a Morir Dignamente” prefirieron no manifestar su opinión porque no tenían tan claro su apoyo.

El catedrático de Derecho Penal de la Universidad Autónoma de Madrid, Miguel Bajo Fernández, a pesar de ser partidario de la eutanasia, consideró difícil dar una opinión absoluta a una “cuestión tan delicada”.

“Cuando se trata de niños me cuesta mucho trabajo admitir la eutanasia, porque se actuaría sin conocer su voluntad. Sólo en casos muy extremos lo apoyaría y bajo salvaguardas mayores de las que la legislación holandesa ha previsto en los adultos”, comentó.