Durante su estadía en Paraguay, el Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, Cardenal Franc Rodé, reiteró que la Iglesia Católica "no puede negociar" su defensa del matrimonio como la unión exclusiva de un hombre y una mujer.
En declaraciones a Radio Cáritas, el Purpurado consideró "sencillamente ridículo, sino fuera criminal, querer llamar familia o matrimonio a la unión de dos personas del mismo sexo".
En este sentido, recordó que el Papa Benedicto XVI ha reiterado en un reciente discurso ante parlamentarios europeos que la defensa de la familia es uno de los temas sobre los cuales la Iglesia Católica "no puede negociar".