El Papa Juan Pablo II exhortó a los ciudadanos de Bosnia-Herzegovina a recorrer “el camino de la paz y de la justicia”, y crear “las condiciones para un perdón sincero y para una auténtica reconciliación, liberando la memoria de rencores y de odios derivados de las injusticias padecidas y de los prejuicios construidos artificialmente”.
“Esta gran tarea exige la colaboración activa y el compromiso serio de todos los miembros de la sociedad, incluidos los responsables políticos”, señaló el Pontífice al recibir las cartas credenciales del nuevo embajador de Bosnia-Herzegovina, Miroslav Palameta.
Tras pedir que esas soluciones sean beneficiosas para todos, Juan Pablo II señaló que ese “es el desafío de una sociedad multiétnica, multirreligiosa y multicultural, como Bosnia-Herzegovina”.