Inversión en educación para enfrentar crisis económica y de valores, pide Benedicto XVI

En su discurso a los más de siete mil miembros de la Libre Universidad María Santísima Asunta (LUMSA) de Roma, que celebra este año su 70° aniversario, el Papa Benedicto XVI resaltó que "la profunda crisis económica, difundida en todo el mundo, con las causas que la originan, ha evidenciado la exigencia de una inversión más decidida y valiente en el ámbito del saber y la educación".

Esta inversión en la educación, dijo el Santo Padre en su discurso, se convierte así en un medio "para responder a los numerosos desafíos abiertos y para preparar a las jóvenes generaciones a construir un futuro mejor".

Tras destacar el aporte de esta Casa de Estudios, Benedicto XVI subrayó que "el contexto actual se caracteriza por una preocupante emergencia educativa en la que asume un relieve especial la tarea de los que están llamados a la enseñanza", si bien "toda profesión brinda la oportunidad de dar testimonio y poner en práctica los valores interiorizados personalmente durante el periodo académico".

Seguidamente el Santo Padre afirmó que "en la compleja realidad social y cultural, la Universidad Católica está llamada a actuar con la inspiración cristiana de los individuos y de la comunidad universitaria como tal; con la incesante reflexión sobre el saber, iluminada por la fe y la investigación científica; con la fidelidad al mensaje cristiano tal y como lo presenta la Iglesia, con el compromiso institucional al servicio del Pueblo de Dios".

La LUMSA, subrayó el Papa, "es una Universidad católica que tiene como elemento específico de su identidad esta inspiración cristiana. Como se lee en su Magna Charta, se propone un trabajo científico orientado a la búsqueda de la verdad, en el diálogo entre fe y razón, en una tensión ideal hacia la integración de conocimientos y valores".

"Hoy como ayer la Universidad necesita verdaderos maestros que transmitan junto a los contenidos y al saber científico un método riguroso de investigación y valores y motivos profundos", dijo el Papa y concluyó alentando a los estudiantes a mantener "siempre abiertos el corazón y la mente a la verdad " para ser "constructores de una sociedad más justa y solidaria".