La organización internacional Ayuda a la Iglesia de Sufre (AIS) informó que miles de fieles participaron el domingo pasado en una Eucaristía oficiada por la inauguración del nuevo seminario greco-católico del Espíritu Santo en Lvov (Ucrania Occidental).
En la Celebración Eucarística, concelebrada por 19 obispos y unos 50 sacerdotes de varios países, el Cardenal Lubomyr Husar, cabeza de la Iglesia Greco-católica de Ucrania –también conocida como Iglesia Católica de rito oriental en comunión con la Santa Sede– calificó el hecho como “un regalo de Dios para esta Iglesia mártir resurgida y un manto de Nuestra Señora, para una nueva generación de sacerdotes”.
El Patriarca oriental destacó la labor del fundador de AIS, Padre Werenfried van Straaten, a quien calificó de testigo de la fe que apoyó a nuestra Iglesia perseguida en los tiempos de la opresión. “Mientras muchos ya habían dejado de creer en su resurrección, el P. Werenfried nunca dejó de confiar en el resurgimiento de nuestra Iglesia”, agregó.