El Arzobispo de México, Cardenal Norberto Rivera Carrera, aclaró que la Iglesia Católica no está en guerra con las sectas u otras religiones y recordó que su obligación es predicar el Evangelio.
En un encuentro con sacerdotes de su Arquidiócesis, el Purpurado explicó que "la Iglesia Católica debe permanecer firme, evangelizadora y testimonial. No estamos en guerra con nadie, ni con las sectas o con otras confesiones; nuestra obligación es predicar el Evangelio".
Asimismo, lamentó que en ocasiones las personas se aparten de Dios por el bienestar material que disfrutan. "Se trata de un cambio de época cultural en el que la gente ve con indiferencia a Cristo y a su Iglesia", indicó el Cardenal Rivera.