En su más reciente nota editorial Octava dies, el Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi señaló que la liberación de 52 presos políticos en Cuba como resultado del diálogo entre la Iglesia y el gobierno, así como la suspensión de la huelga de hambre de Guillermo Fariñas, constituyen una buena noticia y resaltan el papel crucial de la Iglesia Católica en el proceso.
El sacerdote señala en su editorial "que esto nos permita una reflexión. El rol crucial asumido en el proceso de diálogo cubano del Cardenal Ortega Alamino y de Mons. Dionisio García, presidente del Episcopado, ha sido posible gracias al hecho evidente de que la Iglesia Católica está profundamente enraizada en el pueblo y es intérprete atendible de su espíritu y sus expectativas".
La Iglesia, continuó, "no es una realidad extraña, no huye en tiempos de dificultad. Carga sufrimientos y esperanzas, con dignidad y paciencia, sin servilismo pero también sin buscar aumentar las tensiones o exaltar los ánimos, al contrario, con el esfuerzo continuo de abrir caminos a la comprensión y al diálogo".