En una ceremonia que contó con la presencia del Arzobispo de La Habana, Cardenal Jaime Ortega Alamino, se develó sobre uno de los muros del Jardín Madre Teresa de Calcuta en el Convento de San Francisco de Asís, una placa recordatoria dedicada al Beato Juan XXIII.
La lápida –donada por la provincia italiana de Bergamo–, fue develada en un acto oficial que contó también con la presencia del Obispo Auxiliar de Bergamo, Mons. Bordolo Belotti; el Embajador de Italia en Cuba, Elio Menzione; Marcelo Moro, asesor del presidente de la provincia de Bergamo; y Carlos Samper, de la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, entre otras autoridades religiosas y del gobierno.
Julio Portielles, director de Cooperación Internacional, expresó la gratitud ante el gesto de la provincia de Bergamo, región que contribuye a la obra de restauración de la parte más antigua del Convento.