Una ola de ataques dejó al menos siete cristianos muertos y unos 40 heridos en Irak, luego que fundamentalistas detonaran bombas en cuatro iglesias de Bagdad durante el último fin de semana.
Según información de Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), en la noche del último domingo estalló un coche bomba frente a la puerta e la iglesia Santa María de los Caldeos en la calle Palestina de Bagdad, justo mientras los católicos salían de Misa. El atentado dejó siete muertos y unos 30 heridos.
Esa misma tarde estallaron bombas en otros tres templos cristianos, dejando al menos ocho heridos. Los blancos incluyeron las iglesias de San Jorge en Al-Ghadier y San José en Al-Shurta.