El Obispado de San Rafael (Argentina) informó este 30 de abril que el sacerdote Fernando Miguel Yáñez fue dimitido del estado clerical tras ser hallado culpable de tres delitos canónicos.
Si bien esta misma jornada fue absuelto por la justicia civil del delito de abuso sexual a menores de edad, Yáñez fue condenado canónicamente por desobediencia pertinaz; ejercicio ilegítimo de una función sacerdotal; suscitar públicamente aversión y odio contra la Sede Apostólica o al obispo.
A través de un comunicado, el Obispado de San Rafael informó que la sentencia, fruto de un "largo proceso penal administrativo", es con "efecto inmediato" por un decreto emitido con fecha 29 de abril de 2019.