Durante el encuentro del Papa Francisco con los participantes del Congreso "Solidaridad Internacional Trinitaria", promovido por la Orden de la Santísima Trinidad, más conocida como los Trinitarios, el Santo Padre explicó que durante el saludo se mantendría sentado por el dolor de rodilla que sufre.
Bromeó diciendo que hace un tiempo este dolor se llamaba "mal de monja" porque las religiosas "de tanto rezar de rodillas se enfermaban".
"Esto se curará, pero mientras tanto se deben hacer las cosas bien", apuntó el Santo Padre.