Al presidir esta tarde en la Plaza de San Pedro una Misa por el segundo aniversario de la muerte de Juan Pablo II, el Papa Benedicto XVI aseguró que “el perfume de su amor ‘ha llenado toda la casa’, es decir, a toda la Iglesia”.
Ante más de 30 mil personas, entre los que había una gran cantidad de polacos, el Papa renovó a "Dios nuestro agradecimiento por habernos dado a Juan Pablo II durante 27 años como padre y guía seguro en la fe, pastor entregado y profeta valiente de esperanza, testigo incansable y servidor apasionado del amor de Dios".
Al referirse al Evangelios, el Pontífice dijo que en el evangelio de hoy, el gesto de la unción de los pies de Jesús que realiza María en Betania “evoca el luminoso testimonio del amor por Cristo sin reservas y sin limitaciones que Juan Pablo II nos ha ofrecido”.