Al final de la audiencia general de hoy, celebrada en la Plaza de San Pedro, el Papa Benedicto XVI manifestó su cercanía espiritual con las víctimas del terremoto que el lunes sacudió el centro de Italia, dejando hasta el momento 260 muertos, y expresó de su deseo de visitar la zona “en cuanto sea posible”.
El Santo Padre renovó su "cercanía espiritual a la querida comunidad de L'Aquila y de los demás pueblos, duramente sacudidos por el violento fenómeno sísmico de los pasados días, que ha provocado muchas víctimas, numerosos heridos y enormes daños materiales".
El Papa destacó "la solicitud con la que las autoridades, fuerzas del orden, voluntarios y otros agentes están socorriendo a estos hermanos nuestros” porque “demuestra qué importante es la solidaridad para superar juntos pruebas tan dolorosas”.