Al inaugurar el Congreso Eclesial de la Diócesis de Roma, el Papa Benedicto XVI aseguró que aún en la sociedad y cultura de hoy marcada por la sensación de que a "las nuevas generaciones un destino de precariedad y de incertidumbre" es posible vivir la esperanza cristiana.
Desde la Basílica de San Juan de Letrán, el Santo Padre explicó que la esperanza cristiana "concierne en cierto modo a cada uno de nosotros, pero también es esperanza comunitaria, esperanza para la Iglesia y para toda la familia humana".
"En la sociedad y en la cultura de hoy, y por tanto también en nuestra amada ciudad de Roma no es fácil vivir en el signo de la esperanza cristiana. Existe una sensación difusa de que para Italia y también para Europa los años mejores ya han quedado atrás y que espera a las nuevas generaciones un destino de precariedad y de incertidumbre", indicó.