El Papa Francisco visitó de manera privada esta mañana la Basílica de Santa María la Mayor de Roma para orar y confiar a la Madre de Jesús, la Virgen María, su peregrinación a Tierra Santa del 24 al 26 de mayo.
Después de un cuarto de hora de recogimiento y oración ante la imagen mariana conocida como la Salus populi romani (Protectora del Pueblo Romano), el Papa Francisco ofreció un ramo de rosas blancas y amarillas a los pies de la Virgen.
Desde el inicio de su ministerio petrino en marzo de 2013, es la octava visita del Pontífice a la Virgen María, bajo cuya protección confió su pontificado.