Shellie Tucker y su esposo Greg ya tenían un hijo cuando se enteraron que estaban esperando otro bebé. La sorpresa fue mayor cuando los médicos les dijeron que Shellie tendría gemelos y que les recomendaban abortar.
Las ecografías (ultrasonidos) que se realizó Shellie revelaron que las niñas estaban unidas por el tórax y el abdomen, y que además compartían el diafragma y el hígado.
La madre de las pequeñas asegura que el médico les recomendó abortar. "Nos pidió que fuéramos a ver a un especialista, porque él consideraba que debía abortar".