El Director de la Sala Stampa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, explicó que los comunicadores católicos deben en primer lugar "ser creyentes y cristianos. Lo que nos interesa es que el Evangelio de Jesucristo sea conocido y comprendido a través del testimonio de la Iglesia. Si esto no sucede, estamos perdiendo el tiempo".
En su participación en Fátima, Portugal, en la Jornada de las Comunicaciones Sociales titulada "Oficinas de Prensa en la Iglesia: ¿lujo o necesidad", el también Director de Radio Vaticana y del Centro Televisivo Vaticano explicó que los comunicadores católicos "no son personas que hagan propaganda política, ni defensores de intereses particulares o meros profesionales del periodismo".
El momento actual, añadió, abre muchas posibilidades a las comunicaciones sociales de la Iglesia, que debe orientarse "sobre todo a un servicio al Evangelio de Jesucristo".