30 de octubre de 2017 / 06:35 AM
El Papa Francisco asegura que un buen pastor es aquél que está junto al herido, al necesitado, como lo estuvo Jesús, y no como hacían los fariseos que solo pensaban en ellos mismos.
En la homilía que pronunció a primera hora de la mañana en la capilla de la residencia Santa Marta, comentó el Evangelio del día en el que Jesús cura a una mujer que no conseguía mantenerse derecha. "Era una enfermedad de la columna que la tenía así desde hacía años", explicó el Papa.
"Un buen pastor siempre es cercano", todo lo contrario que los fariseos, a quienes "quizás les importaba ellos mismos: cuándo terminaba el servicio religioso, ir a ver cuánto dinero se había obtenido de las ofrendas".