La Catedral de San Vito, símbolo del catolicismo checo, ha vuelto a ser propiedad de la Iglesia en el país luego que el Tribunal Distrital de Praga 1 decidiera poner fin a la usurpación que iniciara en 1954 el gobierno comunista, quen expropió el templo y los edificios adyacentes.
El veredicto todavía no ha entrado en vigor porque existe una apelación del Gobierno. Sin embargo, el Arzobispo de Praga, Cardenal Miloslav Vlk, expresó su satisfacción con la decisión del tribunal. Recordó que la Iglesia siempre fue considerada dueña de la catedral “hasta su apropiación ilegal por parte del régimen comunista”.
La construcción de la Catedral de San Vito se inició en el año 1344 y culminó en 1929.