En la Misa celebrada en la Catedral Metropolitana por la Jornada Mundial de las Vocaciones, el Arzobispo Primado de México, Cardenal Norberto Rivera, recordó que el Señor Jesús necesita de las vocaciones para ser luz en quienes se encuentran en las tinieblas.
"Jesús vino a buscar a la oveja descarriada, a curar a la oveja herida, alimentar a la hambrienta y a la débil cargarla sobre sus hombros. Él quiere llegar a quienes están lejos del evangelio, quiere ser la luz para los que se encuentran en tinieblas, y necesita de las mediaciones humanas para que seamos su rostro y proclamemos la Buena Nueva", expresó el Purpurado ante los seminaristas y promotores vocacionales de la Arquidiócesis de México.
Asimismo, destacó que aceptar la vocación al sacerdocio significa "aceptar dar la vida para que los demás la tengan en abundancia" y no esperar ser servidos, sino estar al servicio de los demás, "el verdadero liderazgo cristiano consiste en ponerse al servicio de los demás, viviendo y desviviéndose y dando la vida", agregó.