Las celebraciones del Santo Triduo Pascual comenzaron hoy en el Vaticano con la Misa Crismal presidida por el Cardenal Giovanni Battista Re, Prefecto de la Congregación para los Obispos, quien durante la homilía agradeció al Papa Juan Pablo II por su “sereno abandono en Dios” y llamó a la renovación del sacerdocio.
El Cardenal Re hizo referencia a la importancia del Jueves Santo para los sacerdotes, al recordar que “hoy es la fiesta en modo particular de nosotros que hemos sido consagrados mediante el sacramento del Orden: Diáconos, Presbíteros y Obispos”.
“Estamos invitados no solo a renovar los compromisos relacionados con la ordenación, sino también a reavivar la frescura de los sentimientos que inspiraron nuestra donación al Señor, profundizando y gustando la belleza del gesto de nuestra respuesta a la vocación a seguir a Cristo de cerca”, señaló.