Durante el almuerzo que compartió ayer en el Monasterio de Sao Bento con la presidencia de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB), el Papa Benedicto XVI entregó a los prelados un donativo de 200 mil dólares para el proyecto que promueve el episcopado brasileño para la preservación de la Amazonía.
La necesidad de vivir la reconciliación con la naturaleza ha sido uno de los temas que el Papa ha abordado durante su visita a Brasil. Ayer señaló ante miles de jóvenes en el estadio de Pacaembú que “el Señor nos pide, o mejor, nos exige ensanchar nuestros corazones para que en ellos quepa siempre más comprensión por nuestros semejantes y por los problemas que envuelven no sólo la convivencia humana, sino también la efectiva preservación y conservación de la naturaleza, de la cual todos formamos parte".
Asimismo dijo que "la devastación ambiental de la Amazonía y las amenazas a la dignidad humana de sus poblaciones requieren un mayor compromiso en los más diversos espacios de acción que la sociedad viene pidiendo".