El Colegio de Fiscales en Utrecht, Holanda, determinó que bajo condiciones “estrictas” la demencia o enfermedad mental puede ser una razón legítima para aplicar la eutanasia o el suicidio asistido.
Refiriéndose al polémico caso del médico que “ayudó a morir” a un paciente de Alzheimer, el organismo dictaminó que este diagnóstico es “insuficiente” para decidir la aplicación de la eutanasia, pero señaló que sí puede ser aplicada cuando el paciente no tenga perspectivas de recuperación psíquica y padezca “dolores insufribles”.
“Es la primera vez que el Colegio de Fiscales del Ministerio Público se pronuncia sobre la terminación de la vida de pacientes dementes”, afirmó el jurista Johan Legemaate.