El Arzobispado de México condenó enérgicamente el "cobarde asesinato" del estudiante Rodolfo Israel Valladares Zavaleta, "quien falleció luego de permanecer cuatro días en terapia intensiva tras recibir un balazo en la cabeza".
El Arzobispado se sumó "a la pena de la Lic. Ruth Zavaleta", tía del fallecido; a la vez que exigió que no haya impunidad en este nuevo asesinato, porque estos crímenes "manchan el buen nombre de nuestra patria, enlutan a las familias y finalmente conducirán a la condenación eterna de los responsables".
El Arzobispado invitó a los fieles a sumarse a las oraciones por el eterno descanso de Valladares Zavaleta y para que Santa María de Guadalupe interceda en el cese de la violencia en México y, "como amorosa madre, de resignación a los familiares y amigos de esta nueva víctima de la barbarie y el pecado".