Un artículo editorial del Sistema de Información de la Arquidiócesis de México señaló esta semana que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no es una sorpresa, pues se ha venido preparando durante 15 años, y estaría siendo utilizado.
La nota editorial cuestionó a las organizaciones sociales y algunos políticos que se han manifestado contra la apertura del mercado agrícola y ganadero porque el tratado "hace 15 años se aceptó en cada una de sus cláusulas, incluyendo la que considera una liberalización arancelaria de productos del campo como maíz, frijol y azúcar, que acaba de cumplirse al iniciar 2008".
"Lo que hoy verdaderamente interesa –sigue el editorial de la Arquidiócesis– es exigir al gobierno medidas eficaces para que el campo mexicano reencuentre su capacidad de producción de los alimentos que necesitamos".