Aunque oficialmente se han esgrimido motivos de seguridad, el partido de fútbol en el que se enfrentarán este viernes las escuadras del Inter y del Milan fue adelantado dos horas y media respecto de su horario inicial después que el pasado lunes así lo solicitara Radio Vaticano para que no coincidiera con la celebración del Vía Crucis que presidirá el Papa Benedicto XVI.
El derbi lombardo se disputará finalmente a las 18.00 horas y no a las 20.30, tal y como estaba previsto. “El horario de inicio del partido se ha adelantado por motivos de orden público en consideración de los recientes confrontaciones con la escuadra interista”, afirmó este martes el jefe de policía de Milán, Gian Valerio Lombardi.
Según la prensa local, la noticia ha sido especialmente bien recibida por las autoridades vaticanas que ya habían expresado su malestar por el hecho de que el encuentro se jugara el Viernes Santo.