San Francisco de Sales, cuya fiesta es este 24 de enero, tenía un temperamento muy fuerte e irascible que poco a poco logró dominar. Por ello les contamos algunas acciones que él puso en práctica para controlar su cólera y llegar a ser el santo de la amabilidad.
El Boletín Salesiano Online de Italia (BSOL) describe que en una ocasión un malhumorado caballero se puso a insultar a San Francisco de Sales. El santo obispo, ante las amenazas, sólo permaneció de pie con el sombrero en la mano.
Luego alguien le preguntó si había sido sentido cólera ante esto y el Doctor de la Iglesia le dijo: “No puedo ocultar que entonces y a menudo la cólera hierve en mi cerebro como el agua que hierve en una olla sobre el fuego, pero, por la gracia de Dios, aunque tenga que morir por resistirme violentamente a esta pasión, nunca diré una palabra en su favor”.