Al recibir hoy a los participantes del Congreso de la Sociedad Italiana de Cirugía Oncológica, patrocinado por la Universidad La Sapienza de Roma y el Hospital de San Andrés, el Papa Francisco señaló que "la comunión fraterna con los enfermos nos abre a la verdadera belleza de la vida humana".
El Santo Padre reconoció que "la investigación científica ha multiplicado las posibilidades de prevención y cura, ha descubierto terapias para el tratamiento de muchas enfermedades diferentes. También ustedes trabajan para ello: un compromiso de alto valor, para responder a las expectativas y a las esperanzas de muchos pacientes en todo el mundo".
"Pero para que se pueda hablar de plena salud, es necesario no perder de vista que la persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios, es una unidad de cuerpo y espíritu. Estos dos elementos se pueden distinguir, pero no separar, porque la persona es una. Así que incluso la enfermedad, la experiencia del dolor y el sufrimiento, no sólo afectan la dimensión del cuerpo, sino al hombre en su totalidad".