El Papa Francisco renovó su llamado a la acogida de los refugiados y migrantes que huyen de las guerras y de la pobreza, y recordó que muchos de los países que se niegan a la acogida son precisamente los que fabrican las armas que luego se emplearán en los conflictos que empujan a poblaciones enteras al éxodo.
"Las guerras afectan sólo a algunas regiones del mundo; sin embargo, la fabricación de armas y su venta se lleva a cabo en otras regiones, que luego no quieren hacerse cargo de los refugiados que dichos conflictos generan".
El Papa Francisco hizo esta denuncia en su homilía de la Misa que, con motivo de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, presidió este domingo 29 de septiembre en la Plaza de San Pedro del Vaticano.