LIMA,
El Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani, aseguró recientemente que "la semilla de los valores se siembra en la familia", y por ello resulta "muy urgente" protegerla.
Durante el programa Diálogo de Fe del 10 de diciembre, en RPP, el Cardenal Cipriani destacó que la familia "es la que garantiza la educación. El punto de partida donde aprendo a respetar a los demás es la familia, no es una ley de seguridad ciudadana".
"El punto de partida donde empiezo a convivir, conversar, es la familia. El punto de partida, la semilla de los valores se siembra en la familia", indicó.
El Arzobispo de Lima señaló que "tenemos que primero proteger la propia familia, cuidarla; cuidar los horarios, el modo en el que hablamos, la paciencia, el respetar a los mayores. Es algo que me parece que es muy urgente".
El Cardenal alentó a seguir el ejemplo de la Sagrada Familia, "una familia muy unida, donde José como padre de familia le va enseñando a cómo trabajar a su hijo Jesús; y María como buena madre lo va educando en lo que es el comer, el vestirse".
Durante el programa, el Primado del Perú se refirió también al enfrentamiento político entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo, que se vive en las últimas semanas.
"El país es mucho más que la suma de diferentes grupos políticos. Pienso yo que las instituciones se tienen que respetar, las formas, las palabras. No quiero hablar de una manera tajante porque saldrían todos a discutir, pero definitivamente el juego político y democrático tiene sus reglas", dijo.
El Cardenal Cipriani subrayó que "esto no es un juego político de un grupito. Es nuestra casa, es nuestra familia. Ojalá que Dios ilumine con la humildad a todos para dar pasos hacia delante".
"El juego político tiene su campo y no debe salir de ahí. Me parece a mí que la Navidad exige dialogar y respetar las instituciones, y de esa manera quien tiene unas atribuciones y quien tiene otras que se acuerde del Perú y se acuerde del pueblo peruano", expresó.
El Arzobispo de Lima destacó además que "cuando los hombres y las mujeres nos alejamos de Dios es porque queremos ser dueños de lo que hacemos. Yo hago lo que me da la gana y déjame tranquilo".
"Eso se llama soberbia, egoísmo, me cuesta encontrar la verdad, me cuesta buscar el bien".
El Cardenal Cipriani alentó a los fieles a ser "un poco como Cristo. El amor del Padre es a Cristo. Te ama a ti en la medida en que te pareces a Cristo".
En esta Navidad, exhortó, "hay que darnos cuenta que hemos heredado la grandeza de ser hijo de Dios".
"Pero para eso evidentemente Dios te dice: 'deja de lado tanto capricho, tanta majadería'. Esta es la vida cristiana, poco a poco, con paciencia, con humildad, pero ahí está el destino del hombre: ser hijo de Dios en Cristo, ser feliz en Cristo".
También te puede interesar:
Las Mejores Noticias Católicas - directo a su bandeja de entrada
Regístrese para recibir nuestro boletín gratuito de ACI Prensa.