El Papa expresó este domingo su profunda preocupación por la reanudación de los enfrentamientos en la parte oriental de la República Democrática (RD) del Congo, donde la violencia ha aumentado tras recientes movimientos del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23).
"Sigo con viva preocupación la reanudación de los enfrentamientos en la parte oriental de la República Democrática del Congo", manifestó el Pontífice, al tiempo que expresó su cercanía a la población afectada. "Exhorto a las partes en conflicto a cesar toda forma de violencia y a buscar un diálogo constructivo, respetando los procesos de paz en curso", añadió.
El Papa se refería a la ofensiva del M23, que con el apoyo de Ruanda, ocupó esta semana parte de la estratégica ciudad de Uvira, en el este congoleño y fronteriza con Burundi, informó EFE.
La zona, rica en minerales, ha sido escenario de intensos enfrentamientos en los últimos meses, incluyendo la toma de Goma, capital de Kivu del Norte, y semanas después de Bukavu, capital de Kivu del Sur, a finales de enero.
La escalada se produce después de la firma el pasado 4 de diciembre en Washington de un acuerdo de paz entre los presidentes congoleño, Félix Tshisekedi, y ruandés, Paul Kagame, en presencia del presidente estadounidense Donald Trump. Desde entonces, Kinsasa y Kigali se han acusado mutuamente de violar el acuerdo.
Este acuerdo se suma a los esfuerzos de mediación auspiciados por Catar, que en noviembre pasado facilitaron la firma de un acuerdo marco entre el Gobierno congoleño y el M23 para avanzar hacia el fin del conflicto.