Ya es oficial: Dublín, capital de uno de los países con mayor población católica de Europa, cuenta por fin con su primera catedral católica en 500 años.
El Papa León XIV aprobó la propuesta presentada por el Arzobispo de la capital irlandesa, Dermot Farrell, para designar a Santa María —hasta ahora procatedral— como la catedral oficial de la Arquidiócesis de Dublín.
Mediante un decreto, presentado el pasado 14 de noviembre, el Santo Padre formalizó este nombramiento, poniendo fin a una situación marcada por siglos de persecución protestante durante la ocupación británica.
Los vecinos se refieren a esta iglesia como la “Pro”, un término que deriva del latín pro tempore (por el momento), y que indica que el templo servía como catedral de forma temporal.
La ciudad de Dublín no ha tenido una catedral católica desde hace cinco siglos, ya que otros templos emblemáticos como San Patricio o Christ Church también pasaron a manos de los protestantes.
A finales del siglo XVII, el Estado creó la parroquia protestande de Santa María, y en 1707 el Arzobispo Byrne la transformó, clandestinamente, en la parroquia católica de Santa María.