En la ciudad de Mosul, Irak, se realizó el lunes 1 de septiembre una celebración oficial para conmemorar la reapertura de las iglesias de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción conocida como Iglesia Al-Tahera (para católicos sirios) y Nuestra Señora de la Hora (dentro del Monasterio Dominicano), tras su completa restauración.
Al evento asistieron el primer ministro Mohammed Shia' al-Sudani, varios funcionarios del gobierno y representantes de las organizaciones que apoyaron la reconstrucción.
Hablando en la Iglesia de la Inmaculada Concepción, al-Sudani dijo “Esta iglesia se alza entre los escombros para representar la casa donde el Señor reúne los corazones de las personas sin división ni hostilidad, en una coexistencia tan antigua como el propio Irak”; y destacó que la reapertura es un retorno al “espíritu de Mosul y a la hermandad que une a su gente”.
Mons. Benedictus Younan Hanno, obispo de Mosul y sus alrededores para los católicos sirios, instó al primer ministro a extender el mismo cuidado mostrado hacia el patrimonio iraquí para “reconstruir el pueblo cristiano”.
“Los habitantes de Nínive –subrayó– necesitan su cuidado y atención, y alguien que escuche sus clamores, especialmente sus hijos e hijas de la comunidad cristiana”.