Cáritas Internationalis emitió un comunicado sobre “la hambruna provocada por el hombre y el ataque a la ciudad de Gaza”, tras la última incursión de las Fuerzas de Defensa de Israel en el enclave, donde Naciones Unidas declaró la hambruna la semana pasada.
“Esto no es una guerra. Es la destrucción sistemática de la vida de la población civil”, señaló la reconocida organización católica de ayuda humanitaria en su comunicado del 25 de agosto. “El asedio de Gaza se ha convertido en una maquinaria de aniquilación, sostenida por la impunidad y el silencio, o la complicidad, de las naciones poderosas”.
“La hambruna aquí no es un desastre natural, sino el resultado de una estrategia deliberada: bloquear la ayuda, bombardear los convoyes de alimentos, destruir las infraestructuras y negar las necesidades básicas”, declaró la organización humanitaria.
“Cáritas Internationalis es testigo de este horror”. La declaración continuó: “A los civiles, en su mayoría niños y mujeres, se les mata de hambre, son bombardeados y exterminados. Gobiernos influyentes, corporaciones y multinacionales han permitido esta catástrofe, mediante el apoyo militar, la ayuda financiera y la cobertura diplomática”.
Cáritas condenó las “declaraciones vacías y los lugares comunes” de la comunidad internacional en respuesta a la difícil situación de los gazatíes.
“Caritas Internationalis ve en Gaza un ataque deliberado contra la dignidad humana y el colapso del orden moral, un fracaso del liderazgo, de la responsabilidad y de la propia humanidad”, declaró la organización.