Cristo llama a sus discípulos a seguir adelante con la verdad pese a las incomprensiones e incluso persecuciones, pues están llamados a ser “signos de contradicción” ante el mundo, afirmó el Papa León XIV antes del rezo del Ángelus que dirigió este domingo desde Castel Gandolfo.
El Santo Padre volvió a Castel Gandolfo el 13 de agosto. En esta localidad de la región del Lacio dirigió el rezo del Ángelus luego de haber celebrado una Misa en Albano, ubicada en la misma región.
León XIV empezó reflexionando sobre la lectura de hoy, del Evangelio de Lucas, en el que Jesús afirma que ha venido “a traer fuego a la tierra”.
“Hoy el Evangelio nos presenta un texto exigente, en el que Jesús, con imágenes fuertes y gran sinceridad, dice a los discípulos que su misión, y también la de quienes lo siguen, no es toda ‘color de rosa’, sino que es ‘signo de contradicción’”, empezó el Papa.
El Pontífice explicó que de esta forma Jesús “anticipa lo que deberá afrontar cuando en Jerusalén sea agredido, arrestado, insultado, golpeado, crucificado; cuando su mensaje, aun hablando de amor y de justicia, sea rechazado; cuando los jefes del pueblo reaccionen con violencia a su predicación”.