Los obispos de Francia han solicitado al arzobispo de Toulouse, Mons. Guy de Kerimel, que reconsidere su decisión de nombrar canciller a un sacerdote condenado en 2006 a cinco años de prisión, por la violación de un adolescente de 16 años.
“Hemos entablado un diálogo constructivo con Mons. Guy de Kerimel, arzobispo de Toulouse, invitándole a reconsiderar la decisión que había tomado sobre el nombramiento del canciller de su diócesis”, indica el comunicado de los obispos franceses, publicado en su sitio web con fecha 10 de agosto.
“En efecto, un nombramiento de tal importancia, tanto canónica como simbólicamente, no puede sino reavivar heridas, despertar sospechas y desconcertar al pueblo de Dios”, agregan los prelados.
El polémico nombramiento
A inicios de junio de este año, Mons. de Kerimel nombró al P. Dominique Spina como canciller y delegado episcopal para los matrimonios, con efecto a partir del 1 de septiembre; un nombramiento que generó una ola de críticas, de las que han hecho eco ahora los obispos franceses.
De Kerimel defendió su controvertida decisión en una declaración a la Agence France-Presse (AFP), afirmando que había “optado por la misericordia” con el P. Spina.