El Papa León XIV recibió este jueves en el Vaticano a una delegación de Venecia, entre quienes se encontraban tres reclusos que pudieron encontrarse con el Santo Padre gracias a un permiso especial otorgado por un juez.
Los reclusos de la cárcel Santa María la Mayor de Venecia se encontraron con el Papa León en la sala del consistorio del Palacio Apostólico Vaticano. El último tramo de su peregrinación, desde Terni hasta Roma, lo realizaron a pie, según señala Gente Venetta, medio de comunicación del Patriarcado de Venecia.
En el encuentro, que tuvo lugar tras cruzar la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, también estuvieron presentes el capellán de la cárcel de hombres, P. Massimo Cadamuro; el director de la cárcel, Enrico Farina; el vicario episcopal encargado de obras de caridad, Mons. Fabrizio Favaro; y el director de Cáritas Venecia, Franco Sensini.
En declaraciones a Gente Venetta, el patriarca Francesco Moraglia contó que le presentó al Papa León XIV “a todo el grupo y las motivaciones de esta peregrinación penitencial y jubilar, realizada en parte a pie y de especial significado sobre todo para quienes viven en estado de restricción, y le dimos las gracias por habernos dedicado su tiempo y recibirnos en audiencia”.
El patriarca indicó además que le regalaron al Santo Padre un cáliz, una patena y una imagen de la Virgen Nicopeia (portadora de victorias) que se conserva en la Catedral de San Marcos en Venecia; mientras que los reclusos le obsequiaron el diario de este viaje, un número de la revista de la prisión y una agenda de las que se hace en la cárcel, fruto del trabajo con las cooperativas.