En la Misa dominical en el Oratorio de Brompton en Knightsbridge, Londres (Reino Unido), el sacerdote rector Julian Large suplicó a los miembros del Parlamento (MPs, por sus siglas en inglés) que votaron a favor del aborto hasta el nacimiento o del suicidio asistido que no se presentaran a comulgar.
Durante su homilía del 6 de julio en la iglesia del Inmaculado Corazón de María, el P. Large se refirió a la reciente y ampliamente difundida situación en la que Chris Coghlan, un parlamentario católico, votó a favor del suicidio asistido y luego criticó públicamente a su párroco por negarle la comunión.
Antes de la votación sobre el proyecto de ley para adultos con enfermedades terminales, el diputado liberal demócrata había sido advertido por su párroco, el P. Ian Vane, que si votaba a favor del suicidio asistido, sería considerado un pecador público obstinado y se le negaría la comunión.
Posteriormente, en la Misa del fin de semana siguiente a la votación en Westminster, el P. Vane anunció públicamente que Coghlan había infringido el derecho canónico y se le estaba negando la comunión.
Coghlan recurrió entonces a las redes sociales y se quejó ante la prensa de que su párroco había intentado coaccionarlo cuando, según él, solo estaba representando las opiniones de sus electores.
Un asistente a la Misa en el Oratorio dijo al Catholic Herald que el P. Large elogió al P. Vane por su valentía y caridad al llamar al diputado al arrepentimiento. Y, aunque el rector reconoció que no conocía los nombres de los diputados católicos que votaron a favor de cualquiera de los proyectos de ley, y por lo tanto no estaría en posición de negarles la comunión, suplicó que, si alguno de ellos estaba presente en la Misa, primero se arrepintiera de sus pecados y recibiera la absolución en el sacramento de la penitencia antes de acercarse a comulgar.