En medio del reclamo salarial de los profesionales del Hospital Garrahan, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) recibió a un grupo de médicos y trabajadores, con quienes dialogó sobre la importancia del entendimiento y les reafirmó el acompañamiento de la Iglesia.
El Hospital Garrahan, uno de los centros pediátricos más importantes de Latinoamérica, se encuentra desde hace semanas en el centro de la escena pública debido al conflicto con el Estado Nacional por el reclamo de una recomposición salarial.
Aunque ya no se encuentran en paro debido a la amenaza de sanciones, continúan reclamando un salario justo. Según datos de los gremios, actualmente el salario neto de médicos y residentes se encuentra rondando los $800.000 (menos de USD $700).
Mientras tanto, la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT) convocó para este miércoles 18 de junio un “abrazo simbólico” al hospital, en reclamo de mejoras salariales, condiciones laborales dignas y en rechazo al vaciamiento de servicios esenciales.
En ese marco, días atrás el Episcopado se dirigió a los trabajadores con una carta en respuesta a esta situación, acercando su adhesión “al pedido que hacen en relación con sus salarios y la situación general de la pediatría en el país”.
“Para nosotros los cristianos, la prioridad de los niños y de los que sufren, junto a los pobres, es un mandato sagrado”, recordaron en su carta, valorando el trabajo de los profesionales que se ocupan de “la dolorosa combinación de estas realidades”.